Marvel nos ha acostumbrado a historias impactantes, pero sin embargo alucinantes que te atrapan en un arco argumental lleno de ficción y drama provocando en uno mismo una inigualable lealtad ante la nueva cara del heroísmo que representara todo lo que está bien en el mundo, ahora es buen momento para conocer más sobre la familia más popular en la historia de los comics dentro de Marvel, la familia fantástica o mejor conocidos como los cuatro fantásticos.
Año 1961 es el año debut de esta fantástica familia, a manos
del reconocido escritor y creador de diversos comics y personajes Stan Lee junto
a Jack Kirby, la familia más emblemática de Marvel salió a relucir marcando una
gran propuesta para competir a su entonces competencia dc comics después de el
éxito que obtuvo con las entregas de la liga de la justicia.
De frente a esta nueva propuesta, los cuatro fantásticos
fueron las historias de superhéroes más distintas a las demás, contando en su totalidad
personalidades que no atraviesan por el anonimato, desarrollando personajes muy
humanizados, pero con la única diferencia de que ellos como al resto de superhéroes
cuentan con poderes que adquirieron gracias a una situación en especial.
Una familia que los une un solo propósito que es
salvaguardar el bienestar de los ciudadanos utilizando estos poderes que les
fueron concedidos, es el comienzo de un equipo más de héroes que se volverían
con el tiempo el núcleo de asombrosas historias y nuevos personajes que
pondrían en aprietos a cualquiera.
Su historia trata de cuatro astronautas que viajan a una
misión en el espacio exterior que al ser
golpeados por una extraña energía de una estrella, esta les otorga mutaciones
que posteriormente se manifiestan con poderes asombrosos, como el estiramiento
de cualquier facción de tu cuerpo, completa invisibilidad, prender en llamas
todo tu cuerpo hasta ser una persona totalmente de piedra, Reed Richards, Susan
Storm, Johhny Storm y Ben Grimm, ellos son los cuatro fantásticos.