Un nuevo universo y un nuevo amigable vecino para todos
nosotros, así podría describir la felicidad y gratitud que en el 2018 sentí a
la llegada de “Spider-man: Into the spider-verse”
Comenzamos con la llegada de un personaje desconocido para mucho y conocido y
amado para otros más, Miles Morales, la cinta despega desde un punto de la vida
de Miles donde el al ganar una beca debe abandonar su antiguo barrio donde era
conocido y amado por muchos para estudiar en una escuela que muchos podrían
llamar privada, llevándolo a abandonar a sus amigos, actividades, todo lo que
amaba para dedicar su vida a su nueva escuela.
Su padre al intentar que Miles llevara un camino correcto, es un poco duro con
las decisiones de Miles al respecto, le prohíbe muchísimas cosas entre ellas
poder ver a su tío Aron Davis o pintar,
en esta nueva vida que lleva miles conoce a personas entre ellas a Gwen Stacy procedente
de otro universo infiltrada en el universo de miles en búsqueda de algo que
ella desconoce hasta el momento.
Miles es picado por una araña en una aventura con su tío para poder pintar un
poco de su arte y salir de la rutina que la escuela lo tenía rodeado, al
siguiente día los efectos de la picadura de la araña se presentan en él haciéndolo
saber que lo que está viviendo no es normal y es idéntico a lo que él conoce que
le sucedió a Spiderman.
Dentro de esta aventura que miles vive conociendo sus poderes, suceden
tragedias como la muerte de Spiderman a manos de King pin el cual desata problemas
en mezclar universos distintos haciendo que la cinta genere un adentramiento a
nuevos Spiderman que llegan a conocer a Miles morales recién adaptándose a ser
el nuevo justiciero de su universo.
La cinta nos muestra el crecimiento de Miles Morales para
ser el nuevo hambre araña después de vivir la muerte de Peter Parker, el
personaje nos hace sentir ese miedo que tiene al ponerse la máscara y sentir
que él no esta hecho para ello, haciéndolo dudar y sentirse lejos de ser lo que
el hombre araña era, pero al final los motivo sobran para posicionar esta cinta
como una de las mejores para hablar de lo que significa ser Spider-man.
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